A finales del 2019, en el país operaban alrededor de 96 mil empresas, de las cuales el 86% correspondían a empresas micro, el14% a empresas pequeñas, un 5% empresas medianas y el resto eran empresas grandes.
Un 75% de las empresas en Panamá están distribuidas en el sector servicio, de acuerdo con datos de la Unión Nacional de Pequeñas y Medianas Empresas (Unpyme)
Franklin Martínez, presidente de la Unión Nacional de Pequeñas y Medianas, explica que a raíz de la pandemia se perdió el 40% de las empresas y 10% en junio 2022 por los cierres. “Eso no significa que el 10% solamente incluía a las empresas que existían antes de la pandemia. Este 10% del cual estamos hablando incluye empresas que se habían creado durante el periodo de la pandemia porque la gran mayoría de las empresas tuvieron que reconvertirse”.
Las empresas creadas en los últimos dos o tres años están entrando al denominado “Valle de la Muerte” lo que significa que tenemos un gran número de ellas está en riesgo de cerrar, añade el presidente del gremio.
De acuerdo con Martínez, la recuperación del sector ha sido lenta, pero más que lenta ha sido sectorizada. Han visto sectores pujantes como los restaurantes salir adelante, sectores como el transporte, sectores como el turismo que no ha tenido el incremento que se esperaba.
El presidente de Unpyme aboga por la creación de un plan o proyecto destinado específicamente para la micro, pequeña y mediana empresa a nivel nacional, una entidad de proyección público privada que en este momento no existe. “Cualquiera de nosotros dueño de una empresa que asiste a una entidad bancaria le piden exactamente los mismos requisitos que se piden a una gran empresa y eso nos pone en desventaja”.
La Cámara Opina
Para la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá (Cciap)es urgente apoyar al sector de la micro, pequeña y mediana empresa en temas como la capacitación en habilidades blandas para una mejor administración de los negocios, definición de procesos para el desarrollo de la cadena de valor en el negocio, y uso eficiente de los fondos, entre otros.
Uno de los principales retos para las MiPyME es la obtención de fondos para su funcionamiento. En este sentido, durante la pandemia el Gobierno Nacional presentó planes de acceso al crédito que fueron puestos a disposición de todas las empresas. Pero, dadas las características de este grupo, los requisitos exigidos por las instituciones financieras resultan difíciles de cumplir, resultando en un gran número de ellas que no han podido hacer un uso efectivo de los dineros.
Recientemente la Cciap y la Unpyme firmaron un memorandum de entendimiento para sumar esfuerzos que incrementen la competitividad y productividad de las MiPyME para que sean sostenibles en el tiempo. Siendo la primera acción, el desarrollo del Congreso Internacional de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa que se celebrará el 29 de marzo, en el marco de Expocomer con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo.