Luego de superada la pandemia, el año 2022 se caracterizó por marcar el camino a la recuperación, por lo que anhelamos que el 2023 sea un año en que logremos avanzar significativamente hacia el desarrollo integral y equitativo de Panamá.
Los retos vividos en el año 2022 han hecho evidente que las soluciones a nuestros problemas comunes requieren de todos los sectores de nuestra sociedad trabajando dentro de un marco de respeto, donde prive un diálogo tanto participativo como constructivo. En otras palabras, dependemos no solo del Gobierno, sino también de la empresa privada y los trabajadores; necesitamos de la sabiduría de nuestros adultos y de la energía de nuestros jóvenes para que como país el 2023 genere un nuevo ciclo de prosperidad.
A pesar de perspectivas económicas a la baja para América Latina, dado el complejo panorama internacional, mantenemos una proyección de crecimiento económico nacional para 2023 de 6.5%. Aspiramos a que este número tenga un efecto multiplicador, beneficie a un gran número de nuestros residentes y sea el motor de la creación de más plazas de empleos dignos para los panameños.
El año 2023 nos debe brindar la oportunidad para sentar las bases de un programa educativo digno del Siglo XXI que permita a los panameños movilidad social. Todos, como sociedad, debemos aprestarnos a la tarea impostergable de actualizar la metodología y planes, orientándolos a la mejora continua. Nuestra juventud reclama una educación moderna, con un nivel pedagógico de excelencia, que les prepare para afrontar los retos y oportunidades de un mundo cambiante.
De igual manera, todos debemos asumir con valentía y confianza la misión ineludible de salvar el Programa de Invalidez, Vejez y Muerte de la Caja de Seguro Social (CSS). No hay tiempo para mayor dilatación del tema, por eso es una exigencia fundamental que cuanto antes se instale la mesa del diálogo por la CSS con la participación de los trabajadores.
Este año que inicia también nos invita a tomar acciones que nos permitan atraer nuevas inversiones foráneas que generen bienestar a todos los panameños, para esto debemos actuar de forma contundente a fin de salir de las listas discriminatorias, que tanto daño hacen al país y que es un elemento fundamental que definirá la llegada de estos capitales y su correspondiente inversión en el territorio nacional. Estas acciones deben incluir pasos concretos en el fortalecimiento del Sistema de Administración de Justicia y la ejecución real de leyes que combatan la corrupción, promuevan la transparencia y la rendición de cuentas.
Además, al ser el año en que inicia la campaña política, esperamos que los panameños podamos tener opciones de gobernantes alérgicos a la corrupción y que estén realmente enfocados en velar por el bienestar de su pueblo.
Los próximos 12 meses son determinantes para el futuro del país. En la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá nos comprometemos a seguir siendo un punto de encuentro, un promotor de iniciativas y un gestador de propuestas concretas que aporten a la construcción del Panamá que todos deseamos.