A inicios de 2023, la Organización Meteorológica Mundial (OMM) anunció que la capa de ozono tuvo una recuperación del 1% por año desde 1998. La OMM destacó que desde que se firmó el Protocolo de Montreal (un acuerdo mundial destinado a proteger la capa de ozono de la Tierra mediante la eliminación progresiva de las sustancias químicas que la agotan) se ha dado una recuperación al prohibirse la producción y el uso de gases clorofluorocarbonados (CFC), aplicados a aerosoles, aislantes, entre otros; y que son los principales responsables del adelgazamiento de esta capa de la atmósfera terrestre que se encuentra en la estratósfera.
Los avances son alentadores; sin embargo, existen desafíos que la humanidad debe enfrentar para lograr la recuperación de la capa de ozono. La OMM asegura que todavía hay presencia de residuos de estos gases en la atmósfera e indica que, el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero podría ralentizar su recuperación.
En este contexto, Schneider Electric, considera importante implementar medidas para su preservación, con la elección de productos que certifiquen su bajo impacto ambiental y con la modificación de algunos hábitos -como el uso inteligente de la electricidad o la adopción de fuentes de energía renovables- que redunden en beneficio del medioambiente.
Dichas soluciones forman parte de lo que la empresa llama “Electricidad 4.0” o “Energía inteligente”, una unión entre lo eléctrico y digital que permite que los hogares, el comercio, la industria y la infraestructura accedan a una energía más limpia, inteligente y eficiente, combatiendo de esa manera el cambio climático.
Impacto de las ciudades
Según datos del Banco Mundial, las emisiones de CO2 en Panamá en 2021 fueron de 12,511 millones de toneladas, lo que representa el 0,26% de las emisiones globales. El sector que genera más emisiones de CO2 en Panamá es el transporte, que representa el 44% del total. Le siguen la generación de electricidad (30%), la industria (16%) y la agricultura (10%).
Un informe más reciente del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) destaca que las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) del transporte en Centroamérica en este año 2023, son, hasta la fecha, de aproximadamente 20,4 millones de toneladas de CO2.
El segundo emisor de GEI en Centroamérica es el sector de la electricidad, de acuerdo con datos del PNUMA. El informe también resalta que, en este año, las emisiones de gases de efecto invernadero de la electricidad en Centroamérica son, hasta la fecha, de aproximadamente 13,8 millones de toneladas de CO2.
“Para reducir nuestro impacto es necesario incorporar tecnologías y estrategias de digitalización para fomentar la sostenibilidad y reducir las emisiones en la industria. A través de la Electricidad 4.0 se logra un consumo de energía eficiente que permita respaldar un desarrollo sostenible, tanto en las ciudades como en la industria”, comentó María José Bazo, Vicepresidenta de Schneider Electric Centroamérica.
La compañía no sólo busca promover la transformación ambiental a través de soluciones como la electrificación, la medición en tiempo real y la distribución eficiente de la energía por medio de IoT, Inteligencia Artificial, automatización e interconexión de dispositivos y sistemas; sino que también abre espacios de información en los cuales demuestra cómo a través de esfuerzos colectivos, a nivel individual y comunitario, se puede seguir revirtiendo el daño causado por las sustancias que agotan la capa de ozono, mejorando el futuro para las siguientes generaciones.
“Es importante el rol que tiene la generación actual de implementar el uso de la energía inteligente y sostenible, no solo para hacer más eficiente el consumo de energía; sino para demostrar que es la generación que está más consciente del problema del cambio climático y es la que puede hacer algo al respecto”, sostuvo María José Bazo.