El pronóstico más reciente de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) señala que la producción mundial de cereales en 2023 se ha incrementado en 3,8 millones de toneladas desde el pronóstico anterior y ahora se sitúa en 2819 millones de toneladas, lo que representa un aumento interanual del 0,9% (26,5 millones de toneladas).
De acuerdo con el informe, la mejora de la previsión obedece a las perspectivas de mejora de la producción de trigo, ya que el pronóstico relativo a la producción mundial se revisó al alza en 3,7 millones de toneladas en septiembre hasta situarse en 785 millones de toneladas. La mejora de las perspectivas se basa casi enteramente en las últimas estimaciones de producción de la Federación de Rusia y Ucrania, que fueron más positivas que las anteriores, gracias al mantenimiento de las condiciones meteorológicas favorables.
Estas revisiones al alza compensan el acusado descenso de la producción de trigo pronosticado para el Canadá, debido al prolongado y persistente episodio de condiciones meteorológicas secas en los principales estados productores de Alberta y Saskatchewan, que ha provocado la reducción de las expectativas generales de rendimiento. De manera similar, los pronósticos relativos a la producción de trigo en la Argentina y Kazajstán se han reducido, puesto que el largo período seco y cálido ha empeorado las condiciones de los cultivos y ha provocado la rebaja de los pronósticos relativos a la producción.
En tanto, el pronóstico relativo a la producción mundial de cereales secundarios para 2023 se mantiene prácticamente sin variaciones en 1511 millones de toneladas; sin embargo, representa un aumento del 2,7 % (39,2 millones de toneladas) respecto del año anterior.
Señala el documento que el pronóstico relativo a la producción mundial de maíz aumentó ligeramente este mes, impulsado casi exclusivamente por la mejora de las perspectivas en el Brasil, que reflejan las estimaciones más recientes de la superficie dedicada al cultivo principal (la safrinha) y del rendimiento de la cosecha en curso. Este año el Brasil está teniendo condiciones atmosféricas generales favorables que respaldan las excelentes perspectivas, ya que se prevé que la producción alcanzará un máximo histórico en 2023. Para compensar el grueso de este aumento, el pronóstico relativo a la producción mundial de cebada se rebajó ligeramente respecto de la cifra anterior, lo cual reforzó las expectativas de un descenso interanual en 2023.
En cuanto al arroz, el hecho de que las plantaciones han aumentado menos de lo previsto ha rebajado las perspectivas relativas a la producción en Bangladesh, Nigeria y las Filipinas desde septiembre. No obstante, estas revisiones se vieron compensadas en gran parte por las actualizaciones relativas a los Estados Unidos de América, donde los funcionarios señalan que en esta campaña hubo un repunte de la superficie cosechada. En consecuencia, la producción mundial de arroz en 2023/24 se sitúa en 523,1 millones de toneladas (arroz elaborado) y se mantiene prácticamente sin cambios respecto del pronóstico de septiembre, lo que implica que ha aumentado un 1,0 % anual.
Previsiones 2023/2024
El último pronóstico de la FAO relativo al comercio mundial de cereales en 2023/24 se mantiene en torno a 466 millones de toneladas, sin variaciones respecto del mes pasado, lo que supone una contracción del 1,7 % (8,0 millones de toneladas) respecto al nivel de 2022/23.
Según las previsiones, las exportaciones mundiales de trigo en 2023/24 (julio/junio) se contraerán un 3,5 % (7,0 millones de toneladas) respecto de la campaña anterior, aunque el pronóstico se mantiene sin variaciones este mes en 193 millones de toneladas, puesto que el aumento de las exportaciones previsto para la Federación de Rusia, respaldado por la abundancia de la oferta, compensaría las revisiones a la baja de las exportaciones de Australia y el Canadá, donde se rebajaron las perspectivas de producción.
Con un pronóstico de 220 millones de toneladas, también sin variaciones respecto del mes pasado, se prevé que el comercio mundial de cereales secundarios en 2023/24 (julio/junio) sufrirá una disminución anual del 0,7% (1,5 millones de toneladas), principalmente a causa de la contracción prevista del comercio mundial de maíz. El pronóstico relativo al comercio mundial de maíz en 2023/24 se ha mantenido estable este mes, en 178 millones de toneladas, puesto que el ajuste al alza previsto de los envíos de maíz procedentes del Brasil, donde la oferta es abundante gracias a una cosecha sin precedentes, se ha visto compensado por las ligeras revisiones a la baja de las ventas del Paraguay y los Estados Unidos de América.
Debido en gran medida a los pequeños ajustes a la baja realizados a las importaciones de África occidental, el comercio mundial de arroz en 2024 (enero-diciembre) será previsiblemente de 53,0 millones de toneladas. Este nivel se situaría solo 0,5 millones de toneladas por encima del bajo nivel de 2023 y se prevé que la débil recuperación del comercio obedecerá en buena parte al aumento de los envíos procedentes del Pakistán, Myanmar y Tailandia, lo cual podría ayudar a contrarrestar los recortes en las exportaciones que probablemente aplicará sobre todo la India, pero también Viet Nam.
