Organizan una noche de baladas a beneficio de la Casita de Mausi

La Casita de Mausi es una fundación que hospeda y acompaña a adultos que realizan tratamientos oncológicos en el Instituto Oncológico de Panamá. Sus principales ingresos provienen de eventos de recaudación y donaciones. Es por ello que un grupo de artistas panameños, con apoyo del Ministerio de Cultura y empresas como Futurad y Comsmarket se han unido para realizar una “Noche de Baladas” a beneficio de la Fundación.

El evento será el miércoles 24 de mayo a las 7 p.m. en el Teatro Anita Villalaz. Los artistas André Regueira, Kemmy Almengor, Álvaro Regueira, Leo Almengor, Spencer y Chispín Regueira de Os Almirantes, Ericksson Jaén y David Gómez interpretarán baladas para transportar al público a momentos únicos, con canciones de ayer y de hoy.

La entrada es una donación que puede realizarse directamente el día del evento en el teatro o a través de Yappy a @casitademausi. Para identificarlo, deben colocar la palabra “AMOR” en la referencia.

“Es un honor para nosotros poder colaborar, a través de nuestro talento, a la extraordinaria labor que están realizando en la Casita de Mausi. Invitamos a todos a contribuir y a compartir una noche de música, romanticismo y mucha solidaridad por una noble causa”, afirmó Kemmy Almengor.

Por su parte, la Directora Ejecutiva de Casita de Mausi, Karinthia Carrillo, expresó: “Estamos muy emocionados. Tendremos una noche hermosa para ayudar a nuestra casita, que recibe a personas adultas con cáncer que vienen de diferentes partes de la República a recibir su tratamiento. Esperamos contar con el apoyo de todos”.

Desde 1996, la Fundación Casita de Mausi brinda alojamiento temporal para personas adultas del interior del país con cáncer y a sus familiares, con el objetivo de darles hospedaje y una atención digna mientras reciben su tratamiento en el Instituto Oncológico Nacional.

Entre las acciones que realizan se encuentra el dar servicios de alojamiento, nutrición, actividades recreativas, arteterapia, paseos para conocer la capital, y lo más importante: apoyo moral y espiritual a la persona en tratamiento médico y sus familiares.

Los colaboradores trabajan para contribuir al bienestar de quienes se alojan en la Casita y muchos de ellos, son personas sobrevivientes a la enfermedad con capacidad de identificarse con los que vienen por primera vez y sus familiares, para realizar su trabajo con eficiencia y humanidad. Son 34 camas distribuidas en 8 habitaciones, en 2022 recibieron a 622 huéspedes y dieron 19.237 comidas.

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