La Comisión Nacional de Salario Mínimo alcanzó un acuerdo para el ajuste de las nuevas tasas salariales que regirán en todo el país a partir del 16 de enero de 2026. El consenso —logrado entre trabajadores, empleadores y el gobierno— impactará a más de 400 mil trabajadores, con incrementos escalonados según región y actividad económica, bajo un esquema que busca hacer justicia laboral sin comprometer la generación y estabilidad de empleos.
El ajuste abarca 59 tasas distribuidas en 74 actividades económicas. Tras varias semanas de análisis técnico, la comisión tripartita aprobó aumentos que varían por sectores y regiones, priorizando los rubros con mayor presión salarial y aquellos donde se busca fortalecer el poder adquisitivo sin afectar la competitividad. Los incrementos serán aplicados gradualmente durante 2026.
En la Región 1, el sector doméstico recibirá un aumento de $10 mensuales, mientras que los agentes de seguridad —en ambas regiones— obtendrán un incremento de $12 mensuales. Los trabajadores de restaurantes y hoteles, así como los del transporte de carga, tendrán un ajuste de $9.50 mensuales. Para los recolectores de desechos, se aprobó un aumento de $15 mensuales en la Región 1. Tanto en la Región 1 como en la Región 2, el comercio al por menor registrará un incremento de $9.50, cifra que también aplicará al comercio al por mayor en la Región 1.
La ministra de Trabajo, Jackeline Muñoz de Cedeño, destacó el “compromiso y responsabilidad” de trabajadores y empleadores al llegar a este consenso, subrayando que la negociación priorizó la paz social y el bienestar del país. Recordó además que las perspectivas económicas del gobierno del presidente José Raúl Mulino Quintero proyectan un mayor dinamismo para 2026, impulsado por el avance de megainversiones en todo el territorio nacional.
A partir de 2026, las partes acordaron mantener reuniones permanentes para monitorear la situación económica del país y garantizar que las futuras decisiones salariales respondan a datos actualizados, fortaleciendo la confianza y seguridad jurídica necesarias para la creación de empleos estables.
Tanto el sector trabajador como el empleador señalaron el papel moderador del Ministerio de Trabajo, destacando que el ambiente de diálogo generado durante las sesiones fue clave para lograr acercamientos y acuerdos en beneficio de los trabajadores panameños.
