Hace 18 años, en una cocina familiar de Panamá, una joven estudiante de ingeniería electrónica empezó a hornear pasteles sin sospechar que estaba amasando, el proyecto de vida que la haría reconocida más allá de las fronteras. La curiosidad de Jenny Ho, comenzó con una simple visita a una página web donde vio pasteles artísticos que no se encontraban en el país.
“Yo decía: nadie está haciendo algo así en Panamá”, recuerda Jenny. Entre fórmulas y circuitos, su carrera universitaria transcurría mientras ella regalaba pasteles a amigos, motivada por el placer de crear algo delicioso. El boca a boca hizo el resto y con una mezcla perfecta de talento, disciplina y pasión nació Delicatesse Postres.
Jenny se graduó con honores, pero el corazón la empujaba hacia otro lado. Su paso por el área de mercadeo en una empresa le enseñó a asumir riesgos, hasta que finalmente decidió dedicarse por completo a la repostería. Se formó con maestros panameños y viajó a Canadá para aprender técnicas de repostería artística, pasteles 3D, figuras de pastillaje, flores y arte en azúcar.
Su preparación, sumada a la visión creativa y a la estructura mental que le dejó la ingeniería, le permitió levantar una empresa que ha producido más de mil pasteles. Sus ojos brillan y en su rostro se dibuja una sonrisa cuando habla de sus creaciones favoritas. Aunque las bodas le enamoran por su elegancia y simbolismo, confiesa que los pasteles de 15 años ocupan un lugar especial en su corazón: “Son divertidos, me dejan soñar y jugar con la imaginación”. También disfruta los retos monumentales, como aquel pastel de boda de 10 pisos adornado con delicadas flores de pastillaje o el majestuoso pastel con un fénix para una celebración de 50 años de un reconocido restaurante local. Para ella, cada encargo es una nueva oportunidad de superarse y crear desde el corazón.
La pandemia la llevó a cerrar su local en San Francisco y volver al lugar donde todo empezó: la casa familiar, ahora convertida en taller de producción a puerta cerrada. Desde allí, sueña con abrir un nuevo espacio con un concepto renovado.
Un reconocimiento sorpresivo
Recientemente se celebró el República Dominicana la sexta edición de los premios Latin American Wedding Awards (Premios Lawa), que reconoció la labor de wedding planners, diseñadores de eventos, organizadores de congresos, entre otros.
Participaron 12 países de Latinoamérica y el Caribe incluido Panamá cuya delegación estuvo conformado por ocho personas de esta industria entre esos Jenny Ho.
Delicatesse Postres fue galardonada como la Mejor Pastelería de Bodas y Eventos de Panamá. Es la primera vez que se otorga este premio en esta categoría, lo que convierte a Jenny en pionera y referente del sector.
“Cuando recibí la noticia de que estaba nominada, fue una total sorpresa. No me postulé; simplemente alguien valoró nuestro trabajo y eso tiene un significado enorme. Es gratificante ser reconocidos a por lo que uno hace y eso se siente bien”, comentó.
Hoy no solo celebra el premio, sino todo el camino que ha recorrido; desde aquella primera vista en Internet, pasando por los cursos y las horas de práctica, hasta los proyectos más ambiciosos que han hecho de Delicatesse Postres una marca sinónimo de arte comestible.
